«El arte nos invita a conocer la belleza y a solicitarla incluso en las circunstancias más trágicas. El arte nos recuerda que pertenecemos aquí. Y si servimos, duramos.»

(Toni Morrison)

¡Y venga con el Día del Libro! Pero dareguel, hijamía, ¿es que has montado una editorial y tienes que pagarte la ortodoncia? Pues casi, pero la verdadera razón de nuestra pasión por el 23 de abril es que los libros siempre se merecerán que demos por culo por ellos. Te han salvado de malos rollos, aburrimiento, rupturas, confinamientos, pandemias mundiales…¡hasta de ese día que te cortaste el flequillo de más! Hoy les rendimos pleitesía centrándonos, como siempre, en visibilizar y a apoyar a las autoras. Para eso, hemos pedido preguntado a comadres y librerías por sus escritoras favoritas, ellas que son mentes y lugares que saben que la cultura, aunque parezca lo contrario en esta región, no es objeto de trueque. Que Morrison nos ampare.

En este primer volumen de nuestro especial contamos con dos mujeres que de libros saben un rato. Una de ellas es Andrea Tovar, escritora murciana que ha superado con creces el momento JASP para darnos en la cara con una novela creada durante el confinamiento sobre un demasiado reconocible apocalipsis, «El fin del mundo» (Ed. Hidroavión) y que acaba de publicar tan fresquísimamente que mañana mismo presentará en Barcelona. ¡Atiende! Que a finales de mes la tienes en Murcia y en mayo, en Madrid. Además, tenemos representación internacional (cómo suena eso, amiga) desde una de las librerías más bonitas y necesarias de la ciudad, Libros Traperos, la tienda de libros de segunda mano que junto a Traperos de Emaús lucha contra la exclusión social y promueve la economía circular. Espacio cultural alternativo en el céntrico de Murcia, le hacen el fuckyou cada día a un Ortega Cano de bronce cercano porque aparte de libros chulérrimos, sus valores sí que son para salir por la puerta grande. Desde allí nos escribe Amélie Gazats, voluntaria francesa, y lxs compas de la librería han tenido a bien no retocar su texto para que disfrutemos del encanto de su castellano adoptivo, estilo que ya quisiéramos nosotras cuando nos echamos un par de cañas.

Recomendaciones con tintes muy personales que nos hacen lo que somos. Y no te despistes, que mañana, ¡la segunda parte!

Politics & Prose in Washington.Credit...Mary F. Calvert for The New York Times

Politics & Prose in Washington.Credit…Mary F. Calvert for The New York Times

ANDREA TOVAR (escritora, redactora, correctora y todo lo que acabe en «-ora» menos cantaora).

Este es un tema que me toca mucho la fibra, la verdad. Quiero decir que me escama viva pensar que la Historia con mayúscula ha sido escrita enteramente por hombres hasta hace bien poco. Por eso elegir autoras es parecido a comer solo verdura en un bufé libre. Eso es tan triste que ojalá cada tía del mundo se ponga ahora mismo a dar su chapa solo por equilibrar la balanza. Y eso también explica que cada vez que veo un libro firmado por una mujer —máxime si es joven—lo compre sin dudar. Bueno, que lo compre sin dudar si tiene buena pinta, claro. Que tampoco vamos a ser más papistas que el Papa y no tengo tanto dinero: soy escritora, no influencer.

harry

Dicho esto, tengo que referirme a la diosa suprema: JK Rowling. Los zeta alegan que ya no se permite amar a esta mujer porque hizo alguna declaración que no era políticamente correcta, pero gracias al Cielo soy millennial y mi corazón pertenece a Hogwarts. De hecho, cuando nos pidieron en el cole escribir una redacción sobre nuestras «heroínas», el 99% de la clase escogió a sus respectivas madres y yo a Jotaká: me parece que marcarse una saga de 7 volúmenes en plena miseria, con final de plot twist, es tener mucha fe en ti misma y en tu historia.

Aparte de Harry, he leído mucha mierda adolescente. He leído todo lo que ha caído en mis manos y me ha interesado, vaya. Menos los libros pedantes que solo se leen para contar que se han leído. Así descubrí, entre otras muchas, a la Anastasia Krupnik que se inventaba sustantivos de Lois Lowry. Tras un vacío existencial de contenido a los veintipico que ahora llenaría el Young adult, di con Partir de Lucía Baskaran y otras mujeres del mercado español como Sabina Urraca o Elisa Victoria y —salvando las tremendas distancias— me sentí dentro de alguna parte —no sé muy bien cuál—.

deshielo

Qué decir: la Woolf me alumbró con su habitación propia y la Plath me enfebreció de ira por el juicio público a la que ha sido sometida, con el que discrepo. La reputación de las mujeres nunca es justa; menos si son escritoras. Además, las notas de la Duras me ayudan porque no quiero que me pase lo que a ella: eternamente pillada de un mismo tema, de los hombres que me aman o no me aman.

También he descubierto algunas joyas nórdicas como Perdón de Ida Hegazi o El deshielo de Lize Spitz.Como novelista, mi preferida es quizá Lionel Shriver: siempre temática interesante, actual y bien contada. Elena Ferrante —pseudónimo— tiene la virtud de engancharte el culo a la silla para beberte mil páginas de su tetralogía en dos semanas, a pesar de que sus recursos narrativos son más bien escasos. Y, como escritora, intento gustarme a mí misma un poco también, aunque no siempre lo consigo —¿puedo hacer aquí spam de mi libro?—.  ¡Feliz día a todas!

Andrea Tovar y su nuevo libro, "El fin del mundo".

Andrea Tovar y su nuevo libro, «El fin del mundo».

AMÉLIE GAZATS (voluntaria en Libros Traperos, Francia).

 Quiero hablar de Virginie Despentes.

Virginie Despentes (Virginie Daget) es una escritora francesa. Nació en Nancy en 1969. Además de ser una figura de la comunidad lesbiana ella promueve un nuevo feminismo. La primera vez que escuché su nombre fue durante una fiesta entre amigas. Cuando habíamos bebido un poco, era aproximadamente las 2 de la mañana y nuestras discusiones terminaron en debates políticos et filosóficos. No tenía ninguna idea de quien era esta mujer pero cuando las he escuchado hablar de ella con tanta admiración me di cuenta de que tenía que añadir estos libros en mi pequeña cultura literaria. Justo tenía 18 años y pasaba mis noches pegando frases feministas en las paredes de mi pequeña ciudad pensando sensibilizar un poco la gente y para que se acuerda que las desigualdades entre hombres y mujeres, la homofobia y los abusos sexuales son todavía demasiados presentes en nuestra sociedad. Virginie Despentes me ha ayudado a construir mi propia visión del feminismo, de la sexualidad y de cómo ser una mujer.

Teoría King Kong. Foto de Amélie Gazats.

Teoría King Kong. Foto de Amélie Gazats.

Usa su experiencia de vida como inspiración por uno de sus libros “King Kong Théorie”. Fue internada en un hospital psiquiátrico cuando tenía 15 años y violada dos años después. Cuando tenía 18 años vivía en un albergue, empieza a interesarse a la cultura post-punk y a trabajar como prostituta. Escribía su primer libro “baise moi” con 23 años. Este libro fue un éxito solo dos años después cuando fue publicado. Nadie quería publicarlo porque estaba considerado como demasiado “trash”. Ha escrito después unos 10 libros, cada uno más controvertidos. En sus palabras salen verdades que a veces no queremos admitir y a mí me alegro ver esas verdades por escrito en un libro accesible a todo el mundo.

Libros Traperos.

Libros Traperos.

Gracias a las concursantas por hacer grande este webzine <3 ¡Hasta mañana!