Nuestra escritora de hoy representa de forma excelente la idiosincrasia de este blog y tantos otros que se pretendan rescatar o valorar como no se hizo en su momento a artistas denostadas o malentendidas por sus contemporáneos. Mina Loy (Londres 1882- Colorado 1966) tocó todas las disciplinas, desde la pintura al teatro pasando por el diseño, alcanzando su cenit en la escritura futurista y otras vanguardias. Sin embargo, hastiada del machismo latente dentro de las mismas optó por buscar su propio camino entre Europa y Norteamérica, abandonar a su familia, y convertirse en uno de los miembros más reconocidos del Greenwich Village, además de una fuerte activista y feminista. Ahora se edita «Insel», una de sus obras más surrealistas, que espera alzarla al mismo nivel que sus compañeros de bohemia, Ezra Pound, Gertrude Stein o T.S. Eliot.

«Insel» (Neversink) es la única novela conocida de Loy y narra la historia de amistad entre un grupo de intelectuales en el París de los años 30. El pintor alemán Insel (dicen que se basa en su amigo Richard Oelze) es un artista que disfruta de ser «outsider» y que llama la atención de la señora Jones. Una estrecha relación surgirá en barrocos cafés, largos debates sobre libros y frustraciones sobre aspiraciones perdidas. En su estilo, «Insel» es excesiva, surrealista, espesa, nada fácil, pero con una magia en su desarrollo en la que es difícil evitar adentrarse como una marea nocturna.

Tras la publicación en los 60 del poemario «Lunar Baedeker & Time-Tables» o la colección de relatos «Stories and Essays of Mina Loy» en el 2011, con «Insel» se salda la deuda con una de las mejores escritoras y artistas multidisciplinares del siglo XX.

Obra de Mina Loy.